Mil sorrys por no haber escrito la semana pasada, pero como ya os contaba en el vlog (no es que no sepa castellano pero si unes video y blog sale...vlog) he estado liadísima con la mudanza y el trabajo.
Y que mejor manera de volver que sin tapujos, con una entrada de esas asquerosas que me hacen mucha gracia escribir...
Entrenes pocas o muchas horas al final caes en una rutina en la cual ciertas cosas que en otra situación te parecerían un asco se convierten en costumbre y ya nos parecen hasta normales.
¿Estás tan acostumbrado que no caes en cuáles son? Tranquilo ya te echo yo una mano verás como al final te salen más que a mí ... Por favor si te cruzas conmigo no me mires con asco, solo soy sincera.
- La eterna botella: Está al fondo de tu mochila y no te acuerdas de la última vez que la lavaste pero aún así sigues bebiendo y rellenándola día tras día, Ten cuidado que te pueden salir unos hongos rositas en el fondo... Ahí lo dejo.
- Culo sobre culo: Te sientas al segundo y sin limpiar en el asiento de la máquina que acaba de usar otra persona y ya ni lo piensas. Que sí que hay gente que pone la toalla, pero esa toalla está también en contacto con el culo, con el tuyo no hay problema (lo conoces bien) pero... ¿y el de la otra persona, sabes dónde ha estado?
- Guantes de queso: Yo ya no uso guantes (básicamente no me rentaba perder uno del par cada semana)¿pero cada cuánto lavas los tuyos?. Que sí que una mano sudada no huele como un pie (gracias a Dios) pero cuando los llevas puestos te sudan las manos y te tocas la frente y coges 1000 cosas y piensa a ver... ¿Cada cuánto los lavas?
- Suelo para qué te quiero: En especial para los crossfitters, cuando vas andando por la calle no se te ocurre tumbarte en el suelo, ¿verdad? Pues que levante la mano quien no se haya tirado nunca al suelo después de un wod muy intenso (encima sudando para pegarse bien ), o después de hacer unas series con una intensidad muy alta. Rico eeee?? Sobre todo porque la gente por general entrena con las zapatillas de la calle así que realmente quitando que no hay perros es como si lo hicieses delante de tu casa.
- Colchonetas absorbentes. Creo que no debería ni explicarlo ... pero entre uso y uso las colchonetas no se someten a un lavado profundo y mucho menos se desinfectan....
- El fondo de tu mochila: Que pasará que misterios habrá... que narices hay en el fondo de tu mochila? Un calcetín sucio, un trocito de barrita... jejeje, a que te ha entrado curiosidad.
- Una mano y otra mano y otra mano ... y así seguimos. Igual soy yo pero no recuerdo haberme lavado las manos antes de entrenar nunca jamás (después sí, no soy tan sucia), pero vienes de la calle y coges una pesa y no solo tu las traes al natural sino que el de antes tampoco y el de después ídem... Mmmm rico verdad? Encima las pesas no se limpian a fondo así que igual tocas la manos de tus ancestros.
Siento todas las explicaciones gráficas pero en esta vida hay que reírse de uno mismo y... ¿siempre te duchas después de entrenar verdad? A las muy malas puedes frotarte con alcohol. Lo mejor de todo (o peor según se vea) es que se me quedarán mil cosas en el plumero... Podéis comentar cuales, siempre contesto...
Reíros mucho, feliz semana y... ¡FELICES AGUJETAS!
Qué asquete me han dado los gimnasios de pronto.
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